A sus 52 años, Demi Moore parece haber hecho un “pacto con el diablo”. Gracias a sus constantes visitas al cirujano, la acriz parece hoy mas joven que ayer… A continuación lo podemos comprobar en nuestra sección semanal de “Así eran, así son”…
Demi Moore, cuyo nombre real Demetria Gene Guynes, creció con su madre Victoria y su padrastro Danny Guynes tras ser abandonada por su padre, militar de las fuerzas aéreas estadounidenses llamado Charles Harmon. Su padrastro, Guynes, era un alcohólico hasta que al final terminó suicidándose.
Muy joven Demi abandonó sus estudios en el instituto de Los Ángeles, para comenzar su carrera como modelo. Sin embargo, muy pronto se daría cuenta que lo suyo no era la pasarela, sino el cine.
Tras debutar en el cine en 1981 con “Choices” y hacer pequeños papeles en películas como “Lío en Río” (1984), “¿Qué pasó anoche?” (1986) o “No somos ángeles” (1989), la ex mujer de Bruce Willis lograría su fama mundial gracias a su papel protagonista en “Ghost” (1990) junto a Patrick Swayze. Entre los títulos de sus últimos trabajos podemos encontrar a “Los Ángeles de Charlie. Al Límite” (2003), “Bobby” (2006), película dirigida por su ex pareja Emilio Estevez, “En la tiniebla” (2006), “Un plan brillante” (2007), “Mr. Brooks” (2007), junto a Kevin Costner o “Margin Call” (2011) o Very Good Girls (2013).
Larga lista de conquistas
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Mantuvo una relación con el también actor John Stamos antes de casarse con el músico de rock Freddy Moore, de quien Demi tomó su apellido artístico, en 1980. La pareja puso fin a su matrimonio en 1984.
Tras un breve noviazgo con Emilio Estevez, se casó en 1987 con el actor Bruce Willis, fruto de cuya unión nacieron sus tres hijas Rumer, Scout LaRue y Tallulah.. Demi y Bruce anunciaban su separación en 2000.
Cinco años después se casó con el actor Ashton Kutcher, dieciséis años mas joven que ella. El matrimonio se separó en el año 2011, por supuestas infidelidades del joven actor.
Desde entonces Demi Moore parece no haber encontrado a su media naranja…
Problemas de adición
El 23 de enero de 2012 fue ingresada en un hospital de Los Ángeles por la ingesta abusiva de drogas, según el audio de la llamada de emergencia al 911 realizada por una amiga de la actriz, quien manifestó que «Demi fumó algo…, no es marihuana…, es como incienso…».
Ese mismo año decidió internarse en un exclusivo centro de rehabilitación llamado Cirque Lodge, en Sundance, Utah. El centro es conocido por haber tratado a celebridades como Lindsay Lohan, Eva Mendes y Mary-Kate Olsen. El motivo del ingreso de la actriz era solucionar sus problemas de adicción, además de un desorden alimenticio, que la ha mantenido con una extrema delgadez.
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