Una prenda con significado, que llegó a la Zarzuela cubierto de lodo desde una de las tiendas devastadas por la dana.
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Pocos imaginarían que un vestido cubierto de lodo por la dana terminaría en el armario de la Reina Letizia. Pero así fue. Una prenda que parecía destinada a la pérdida tras la devastación de la DANA en Benetússer acabó siendo elegida por la monarca para dos eventos de gran relevancia. “Pensaba que era una broma cuando nos llamó su estilista”, confiesa la dueña de la tienda Aloha Benetússer, Francis Mandingorra, quien fue testigo de cómo su negocio, como tantos otros, quedó afectado por las lluvias torrenciales.
La historia del vestido de La reina Letizia elegido en la devastadora DANA
La historia comienza poco después del desastre, cuando Francis y su equipo estaban limpiando el barro de su tienda. En ese momento, una pareja de jóvenes argentinos entró pidiendo usar el lavabo, lo único que había quedado intacto en el local. La chica, periodista de un canal de noticias de Argentina, quedó impactada por la escena y ofreció realizar una entrevista en directo. Lo que parecía un simple reportaje terminó viralizándose y generó una avalancha de mensajes de apoyo en redes sociales.
Entre ellos, uno muy particular: un mensaje de Eva Fernández, estilista de la Reina. Al principio, Francis y su hija no le dieron importancia, creyendo que era una broma. Sin embargo, la insistencia de Fernández las llevó a contactar con la Casa Real, descubriendo que, en efecto, la Reina estaba interesada en adquirir algunas prendas de su tienda.
Un vestido con destino incierto
Tras una videoconferencia con la estilista, Francis mostró varias opciones de ropa que podían encajar con el estilo de doña Letizia. Eva Fernández seleccionó varias prendas, pero las dificultades no terminaron ahí. Justo cuando la estilista planeaba viajar a Valencia para recoger la ropa, una nueva alerta meteorológica cerró los accesos, impidiendo su llegada. Sin rendirse, coordinó con el equipo de la marca de joyería Singularu, también afectada por la DANA, para que recogieran los vestidos y los enviaran directamente a la Zarzuela, tal como estaban, con barro y todo.
En palacio, las prendas fueron cuidadosamente limpiadas y ajustadas a la Reina. Aunque el vestido negro de estilo abrigo estaba inicialmente pensado para su viaje oficial a Italia, la fecha del funeral por las víctimas de la DANA en Valencia se confirmó a última hora, y se decidió que era la mejor opción para la ocasión. Para la ceremonia, se sustituyeron sus botones dorados por otros negros, en señal de respeto.
El vestido que la reina Letizia rescató de la DANA: Un gesto con mensaje
Semanas después, el 6 de marzo, la Reina volvió a lucir la misma prenda, esta vez en el concierto homenaje a las víctimas del terrorismo, devolviéndole sus botones dorados originales y combinándola con unos pendientes de Singularu. De esta manera, Letizia no solo rindió tributo a las víctimas, sino que también visibilizó a los comercios que luchan por recuperarse tras la tragedia.
Para Francis, este gesto ha sido un impulso emocional en medio de un proceso difícil. Aunque las calles de Benetússer aún llevan las huellas del desastre, el apoyo recibido y el reconocimiento a su trabajo han sido una luz de esperanza. “La ilusión por todo lo que ha pasado no me la quita nadie”, afirma.
Doña Letizia ha demostrado una vez más que su vestimenta no es una elección casual, sino una forma de enviar mensajes de solidaridad y apoyo, resaltando aquellas historias que merecen ser contadas.
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