La Reina Letizia rescata de su vestidor su mítica blazer de Uterqüe para viajar a Toledo.
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Este jueves los reyes don Felipe y doña Letizia han viajado a Toledo, una ciudad que siempre les recibe con los brazos abiertos, para inaugurar la Residencia Comunitaria Hospital del Rey, que se suma a la red de dispositivos de atención a personas con trastorno mental grave de la Fundación Sociosanitaria de Castilla-La Mancha.
Este centro, que comenzó con solo diez pacientes, en los próximos meses va a ir incorporando progresivamente residentes hasta completar las 60 plazas. El Hospital del Rey lo fundó en Toledo, en 1603, la Cofradía del Corpus Christi, como lugar de curación para pobres y gente sin recursos, labor que realizó hasta el año 1836, cuando pasó a depender de la Beneficencia Provincial, convirtiéndose en asilo de ancianos hasta 2005.
Tras la inauguración de la Residencia Comunitaria Hospital del Rey, los reyes disfrutaron de un agradable paseo por el Casco Histórico de Toledo, donde pudieron saludar a los que se habían acercado a verles.
Para disfrutar de su paseo por las calles de Toledo, la reina Letizia ha rescatado de su vestidor su mítica blazer de doble botonadura con un estampado de cuadros pata de gallo negros sobre fondo blanco. Se trata de un modelo de la extinta marca de Inditex, Uterqüe que cuando salió a la venta en 2019 tenía un precio 179 euros, aunque se agotó poco después de que la monarca la estrenara. La ha combinado con unos pantalones pitillo de color negro, de Hugo Boss, que también llevan en su armario varias temporadas.
Completando su perfecto estilismo en blanco y negro, ha elegido unos zapatos de salón de tacón cómodo de Pretty Ballerinas, el modelo Kendall cuyo precio son 249 euros, perfectos para poder pasear por las empedradas calles de Toledo. Y, como joyas, o unos pendientes de perla con forma de lágrima. Por supuesto, no faltaba su anillo de Coreterno.
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