La pareja, que comparte una historia de amor de casi dos décadas, amplía su familia dos años después del nacimiento de su primogénito.
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La imagen mas tierna de Rafa Nadal con su hijo
Xisca Perelló, el mayor apoyo de Rafa Nadal en el anuncio de su retirada
Después de conquistar las pistas de tenis más importantes del mundo, el extenista se encuentra ahora en un momento muy especial, alejado del deporte de élite y centrado por completo en su vida familiar. Rafa Nadal y su esposa, Mery Perelló, están esperando su segundo hijo, una noticia que ha llenado de alegría a su círculo cercano y ha sorprendido gratamente a sus seguidores.
La pareja, que mantiene una relación desde su adolescencia en Manacor, ha construido una sólida vida juntos a lo largo de los últimos 19 años. En octubre de 2022 dieron la bienvenida a su primer hijo, al que llamaron Rafael, como su padre. Desde entonces, ambos han mantenido un perfil discreto respecto a su vida familiar, aunque Nadal ha compartido en algunas entrevistas cómo la paternidad ha transformado su visión de la vida.
Una nueva etapa tras el adiós al tenis profesional
Ahora, con la llegada de su segundo hijo en camino, la felicidad vuelve a ser protagonista en su hogar. La noticia ha sido revelada por la revista Semana, que publica imágenes recientes de Mery Perelló con una abultada barriga, lo que confirmaría que el embarazo ya está bastante avanzado. Aunque la pareja no ha hecho declaraciones públicas, diversas fuentes confirman que la familia está emocionada y que tanto Mery como el bebé se encuentran en perfecto estado.
Desde que Nadal anunció su retirada del tenis profesional en 2023, ha disfrutado de una nueva rutina más tranquila y centrada en su hogar. Esta pausa en su carrera deportiva ha coincidido con una etapa vital muy importante, en la que ha podido estar presente de forma activa en el crecimiento de su hijo y, ahora, acompañar a su esposa durante su segundo embarazo.
Mery Perelló, discreta y activa durante la gestación
Mery Perelló, de 36 años, continúa ejerciendo su papel como directora general de la Fundación Rafa Nadal, una organización dedicada a proyectos sociales y educativos, sin dejar de lado su faceta más personal como madre y esposa. El pasado 27 de marzo, durante un acto de la Fundación en Mallorca, fue vista luciendo un estilismo holgado que buscaba disimular su embarazo, aunque algunos gestos como taparse la zona abdominal con las solapas del abrigo alimentaron las sospechas que hoy ya se han confirmado.
La discreción siempre ha sido una constante en la vida de la pareja, y esta nueva etapa no es la excepción. Mery ha seguido con su día a día con total normalidad, sin grandes cambios ni anuncios públicos, a pesar del avance del embarazo.
Una decisión tomada con tiempo y amor
La decisión de ampliar la familia ahora que la exigente carrera deportiva de Nadal ha quedado atrás no es casual. La pareja siempre ha valorado la importancia de estar presentes en la crianza de sus hijos y, con más tiempo disponible, han considerado que es el momento perfecto para dar ese paso. El pequeño Rafa, que ya tiene dos años y medio, pronto tendrá un compañero de juegos con quien compartir aventuras en su casa de Mallorca.
Discretos, unidos y centrados en su vida familiar, Rafa y Mery demuestran que más allá del éxito deportivo, su mayor triunfo es el que han construido en casa. La llegada de su segundo hijo no solo refuerza su vínculo, sino que inaugura un nuevo capítulo en sus vidas, lleno de ternura, complicidad y tiempo en familia.
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