Por Vanessa Pragasam
La Semana Santa, es el momento más intenso de todo el año. Son días de reencuentros, tradiciones y pasos. Como cada año tendremos que estar pendientes del cielo para que la lluvia, el enemigo principal de las cofradías de Semana Santa, no arruine su momento, el más esperado en muchas ciudades españolas.
Aunque hayáis decidido escaparos a la playa esta Semana Santa, siempre es una buena idea disfrutar de las tradiciones locales propias de estas fechas, aunque no seáis muy religiosos. Os menciono algunas de las procesiones más conocidas de España: no están todas las que son pero si son importantes todas las que están… Todo un espectáculo que ha hecho que muchas de ellas sean declaradas Bien de Interés Turístico nacional e internacional.
1. La Semana Santa sevillana es una de las más importante de España e incluso del mundo y está considerada fiesta Turística Internacional. 57 cofradías de todos los barrios realizarán el itinerario de su estación de penitencia a la Santa Iglesia Catedral. La Madrugá es la noche más intensa y esperada (del Jueves al Viernes Santo), al paso de Jesús del Gran Poder, la Esperanza de Triana, la Macarena o el Cristo de los Gitanos, algunas de las figuras más representativas. Las saetas que se cantan desde los balcones son la mejor banda sonora para esta noche llena de gente y de sentimiento.
2. La Semana Santa de Zamora es el acontecimiento religioso más importante de la ciudad. Declarada de Interés Turístico Internacional, este año contará con 17 procesiones y sus celebraciones comenzarán el Jueves de Pasión (6 de abril) con el traslado del Nazareno de San Frotis, finalizando el Domingo de Resurrección (16 de abril) con la Cofradía de la Santísima Resurrección. Algunos de estos cortejos son casi legendarios como el Cristo de las Injurias que desfila el miércoles Santo. Resalta el contraste entre las procesiones nocturnas y las diurnas teniendo en común el arte, el colorido, la devoción y la música.
3. La Semana Santa de Málaga posee una tradición que se remonta a la época de los Reyes Católicos. Enormes tronos que no salen de las iglesias porque no caben por sus puertas, verdaderas capillas andantes de hasta 5000 kilos mecidos por decenas de portadores. El mejor día, el Jueves Santo, con el traslado del Cristo de la Buena Muerte por parte de los Legionarios. Desfilan desde el puerto hasta la Iglesia de Santo Domingo a un ritmo de cornetas, tambores y 180 pisadas por minuto… Uno de los momentos más emocionantes de la Semana Santa malagueña.
4. Las procesiones de Semana Santa de Valladolid también son un bien Turístico Internacional desde 1980 con sus 20 Cofradías y Hermandades que realizan 33 procesiones con 61 pasos distintos. Todas ellas participan el Viernes Santo en la Procesión General al son de tambores, dulzainas y cornetas donde se exhiben las mejores piezas de Gregorio Fernández y Juan de Juni. Si no llegáis a tiempo a verlas, se podrá disfrutar de ellas en las Iglesias que estarán abiertas toda la semana.
5. Si habéis organizado vuestra Semana Santa en Cantabria, no os podéis perder La Pasión Viviente en Castro Urdiales. Declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional en 2012, se celebra el Viernes Santo y más que una procesión es una representación teatral, desde la última cena hasta la Resurrección, protagonizada por más de 300 participantes voluntarios. El casco antiguo se llena de color y de escenas emotivas… Un recorrido por unos escenarios naturales realmente espectaculares, desde la Iglesia gótica de Santa María, el castillo de Castro Urdiales o las vistas de toda la ciudad desde el Monte Calvario.
Las procesiones son manifestaciones de fe que están influenciadas por la tradición y por las costumbres de cada pueblo. Si nunca os habéis acercado a ver una, creo que es un espectáculo que merece verse aunque sea una vez en la vida.
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