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El príncipe Guillermo de Inglaterra se contagió poco después que su padre, Carlos de Inglaterra, y el motivo por el que decidió mantenerlo oculto fue para no aumentar la preocupación de los ciudadanos sobre el virus, tal y como informa el mismo tabloide.
El marido de Kate Middleton se contagió el pasado mes de abril y pasó el coronavirus en Anmer House, en Norfolk, donde estaba confinado con su familia, Kate Middleton y sus tres hijos, George, Charlotte y Louis, desde finales de marzo.
Además, según ha revelado este domingo la BBC y han publicado varios medios británicos, a falta de la confirmación del Palacio de Kensington que por el momento no ha negado la información, el príncipe prefirió ocultar lo que estaba sucediendo para no preocupar a nadie, ni a su familia ni al Estado en plena pandemia.
Según la prensa británica, el príncipe Guillermo habría sufrido algunos síntomas como dificultades respiratorias, por lo que continuó con su agenda oficial telemáticamente. Según ha afirmado The Sun, el duque de Cambridge solo se tomó siete días de descanso de videollamadas y mensajes -entre el 9 y el 16 de abril-.
El positivo del príncipe Guillermo fue, por tanto, posterior al de su padre, el príncipe Carlos sobre el que sí informó la Casa Real británica. El heredero de la corona estuvo confinado en su casa de Escocia, y aislado durante siete días de Camilla Parker. Sin embargo, como él mismo confirmó, el hijo de la reina de Inglaterra, de 71 años, “tuvo suerte” ya que a penas sufrió algunos síntomas de la enfermedad tan sólo perdió el gusto y el olfato, algo que en junio aún no había recuperado.
También por esas fechas el primer ministro británico Boris Johnson luchaba contra la Covid-19 en el hospital donde ingresó el día 5 de abril y salió el 12 tras haber vencido la enfermedad pasando incluso por la unidad de cuidados intensivos.
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