Así han sido las “angustiosas” primeras 48 horas de Rafael Amargo en la cárcel, donde ingresó el pasado viernes.
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Rafael Amargo detenido, de nuevo, por tráfico de drogas
La Fiscalía de Madrid pide nueve años de cárcel para Rafael Amargo
Rafael Amargo ha entrado en prisión preventiva desde que el pasado viernes fuera llamado al “quebrantar reiteradamente” el acuerdo por el que se comprometía a acudir el día 1 y 15 de cada mes a firmar en los juzgados para mantener la libertad hasta que llegara la fecha de su juicio. Recordemos que el bailaor está acusado por un delito contra la salud pública por el que la Fiscalía le solicita 9 años de prisión.
En estas primeras 48 horas en prisión, Rafael Amargo se ha tenido que adaptar a su nueva realidad y es que permanecerá en prisión hasta, al menos, la celebración del juicio.
Una situación que le habría llevado a sufrir una crisis de angustia “espantosa”. Una situación “angustiosa” para el bailaor que, sin duda, se ha agravado al conocer el delicado estado de salud de su padre. Florentino ha tenido que ser ingresado de urgencia en el hospital después de conocer la decisión del juez de su prisión preventiva porque, según parece, su estado de salud es crítico.
“Situación de crisis, de angustia, bastante grave”
Según Informalia, estas últimas 48 horas en prisión han sido bastante angustiosas para Rafael debido a un aumento de la “situación de crisis, de angustia, bastante grave que le impide a veces socializar”. Un estado de ánimo que ya sufría desde el dictamen de prisión provisional, según la misma publicación. Además, según los informes psiquiátricos del bailaor, su cuadro clínico es “debido a una fobia a la prensa” y las consecuencias de su adicción a la metanfetamina, lo cual le impedía enfrentarse a los reporteros que se apostaban en la puerta de los juzgados.
Rafael Amargo se encontró con la prisión inmediata por sorpresa. Y es que, cuando acudió el jueves para una vistilla a la Audiencia Nacional, nada sabía de la decisión del juez. Desde allí fue trasladado de forma inmediata en furgón a Soto del Real donde estuvo durante su primer día en el módulo de admisiones. Después, fue internado con el resto de presos.
En prisión, tiene los horarios muy marcados y las visitas restringidas a 40 minutos que pueden dividirse en dos visitas o solo una el fin de semana. Además, puede hacer diez llamadas telefónicas a la semana de cinco minutos a números previamente autorizados.
Ante esta situación, según fuentes cercanas a su abogado, su defensa ha preparado un recurso de súplica argumentado precisamente en la salud mental del bailarín, para poder salir de la prisión y volver al régimen de libertad condicional.
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