El príncipe Harry y Meghan Markle anunciaron su compromiso el 27 de noviembre y poco a poco se van revelando varios detalles de la que, sin duda, será la boda real del año: su ubicación (la Capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor) y que Meghan se bautizará y confirmará en la Iglesia de Inglaterra antes de la ceremonia. Además, se ha hecho público que la actriz se saltará el protocolo y ofrecerá ante los testigos de este día tan especial un discurso, algo que hasta ahora no estaba permitido.
Sin duda, Meghan Markle ha llegado a la Familia Real Inglesa con un toque de aire fresco que ya se ha hecho notar en varias ocasiones desde que la pareja hizo oficial su compromiso, poniendo del revés algunas de las costumbres más arraigadas de la familia Windsor.
De hecho la reina Isabel II rompió la tradición este año al invitar a la joven a las navidades familiares en Sandringham, hasta ahora sólo reservadas para parejas casadas.
Ahora, según publica el Sunday Times, la futura esposa del príncipe Harry romperá la tradición el día de su boda al dar un “afectuoso” discurso en el banquete para mostrar su agradecimiento a su nuevo marido, la Reina y sus amigos y familia. Una tarea que suele hacer el padrino o el padre de alguno de los novios.
“Ella quiere tener la oportunidad de darle públicamente las gracias al príncipe Harry. También pretende mostrar su agradecimiento a todos aquellos que los han apoyado. Meghan dará su discurso de boda en caso de que su padre, Thomas Markle, no lo haga. Probablemente, después de todo, llevará a Meghan al altar. Pero, posiblemente, no quiera hablar delante de cientos de personas”, asegura una fuente al diario inglés.
De hecho, no será la primera vez que Meghan Markle rompa el protocolo. Recordemos que hace tan sólo unos días, durante su visita oficial a Cardiff, la capital de Gales, la futura duquesa de Sussex firmó autógrafos a la gente que se agolpaba en la ciudad para verla. Rubricar su firma está prohibido por los Windsor, pero ella quiere acercarse al pueblo, demostrar que es una más y con su actitud tan cercana se ha ganado, sin duda, el cariño del pueblo inglés.
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