Chanel cerró ayer la París Fashion Week transformando el majestuoso Grand Palais en un bosque otoñal, tapizado de hojas secas y musgo para presentar su colección Otoño-Invierno 2018/19.
No hay colección sin escenografía para el diseñador Karl Lagerfeld. En esta ocasión volvió a apegarse a la naturaleza después de recrear paisajes exuberantes de cascadas y jardines franceses en sus dos últimos desfiles.
La colección era una oda al otoño… Las modelos desfilaron a través de montones de hojas un total de 80 looks «ready-to-wear» que variaron desde el clásico tweed de Chanel hasta abrigos de pieles, vestidos de encaje negro y bufandas de gran tamaño;zapatos estilo Oxford en charol negro y botas mosqueteras con puntera dorada o estampada.
El espectáculo se abrió con una selección de prendas en tonos negros y grises que se acompañaron de guantes y bufandas de brillantes tonos azul, naranja y rosa y para finalizar el desfile, vestidos de encaje negro acompañados de guantes de cuero de colores muy brillantes. Entre las que lucían en la pasarela estaba la modelo Kaira Gerber, con un mini vestido de ncaje negro, guantes rosas y pendientes con el logotipo de la marca.
En el «front row», las fieles a la marca, como Carla Bruni, Vanessa Paradis, Lily Rose, Geraldine Chaplin y Keira Knightley.
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