«Mujer» vuelve esta noche a Antena 3 con el capítulo 47. La llegada de Piril con sus hijos al refugio provoca una situación explosiva. No te lo pierdas a partir de las 22:45.
Índice de Contenidos
«Mujer» Capítulo 46: Bahar acusa a Sarp de lo ocurrido
«Mujer» Capítulo 45: Bahar huye con Sarp ante los ojos de Arif
Capítulo 47 Mejores Momentos
Sarp está jugando tranquilamente con Nisan y Doruk cuando alguien llama al timbre de la casa. Pocos saben que están allí, así que creen que puede tratarse de Bahar, que había salido a comprar un cargador para el móvil. Sin embargo, cuando Nisan abre la puerta, se encuentra con una mujer a la que aún no conoce. Está con dos niños pequeños. Y, detrás de ellos, Munir y la niñera. Se trata de Piril, que ha decidido presentarse en la casa sin avisar a Sarp, en una arriesgada decisión para recuperarle. Piril es consciente de que allí va a encontrarse cara a cara con Bahar. Y también de que Nisan y Doruk van a descubrir que los gemelos son sus hermanos.
Si la situación con Sarp ya estaba tensa en el refugio, ahora Bahar se encuentra con otro elemento aún más perturbador. Al llegar a la casa, ve a Nisan y a Doruk abrazados, cohibidos, y no tarda en descubrir el motivo: la llegada de Piril con sus hijos, los que tuvo con Sarp. Bahar deduce el momento incómodo que han tenido que vivir sus hijos al descubrir que los gemelos con sus hermanos. En ese momento, Piril entra en el salón. Es el momento en el que se presentan formalmente, después de haberse encontrado en el colegio y en el hotel. La tensión es máxima y, sin embargo, Bahar reacciona de manera sorprendente.
Bahar al fin puede realizar esa llamada que tanto desea para dar señales de vida, para contar a sus padres y amigos que Nisan, Doruk y ella están bien. Primero marca a Enver, como pensaba. Sin embargo, en el último momento, cambia de opinión. El impulso la lleva a llamar a Arif. La conexión entre ellos vuelve a ser total. Se echan de menos. Eso sí, él decide mantener en secreto la muerte de Yeliz. Al despedirse, los dos guardan un significativo silencio.
Cada vez que Bahar y Piril se quedan a solas, crece la tensión. De momento, Bahar parece estar tomándose las circunstancias de manera muy diplomática, extrañamente bien. Sin embargo, está fingiendo porque, por dentro, está herida. Por eso, cuando las dos se encuentran en la cocina, Bahar acaba estallando. Le revela a Piril que sí la recuerda, de cuando coincidieron en el colegio. Y también por la estampa tan familiar que contempló en el vestíbulo del hotel.
Nisan y Doruk han descubierto en el jardín de la casa una cama elástica, y llaman a Bahar para que la vea. Incluso la animan para que se suba y salte con ellos y con Sarp. Es un momento de felicidad, pero efímero. No tan lejos de allí, todos asisten al funeral de Yeliz. Con una inmensa pena y riguroso luto, despiden a una gran amiga. Ceyda es la más triste, incapaz de contener las lágrimas. Tarde o temprano, Bahar acabará conociendo la más amarga de las noticias.
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