La hija de Jesulín de Ubrique y María José Campanario demandó a Telecinco y a Kiko Hernández y, el Juzgado de Arcos de la Frontera, ha fallado a su favor.
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Julia Janeiro, hija del torero Jesulín y la odontóloga María José Campanario, ha logrado recuperar su anonimato gracias a una sentencia judicial que pone fin a su exposición mediática y que ha tenido acceso ¡HOLA! en exclusiva. La resolución, emitida por el Juzgado de Primera Instancia nº 2 de Arcos de la Frontera, ha dado la razón a la joven de 22 años, quien había demandado a Telecinco y al periodista Kiko Hernández por vulnerar su derecho al honor, la intimidad y la propia imagen.
Julia Janeiro recupera el anonimato: Una batalla por la privacidad
A lo largo de su vida, Julia Janeiro ha sido objeto de atención mediática debido a la fama de sus padres, pero ahora, con 22 años, ha decidido poner un alto a su visibilidad pública. Según la sentencia, la joven no es un personaje público y no debe ser considerada como tal por el hecho de ser hija de figuras públicas como Jesulín y María José Campanario.
El juez ha destacado que, a pesar de la cobertura mediática que su vida ha recibido en el pasado, Julia tiene todo el derecho de vivir alejada de los medios. “La actividad pública de sus padres no convierte automáticamente a la demandante en una persona pública”, señala la resolución.
Telecinco y Kiko Hernández, vulneraron los derechos de Julia
La sentencia detalla que los medios de comunicación, en especial Telecinco y Kiko Hernández, vulneraron los derechos de Julia al difundir aspectos de su vida personal sin pruebas verificables. A lo largo de diversos programas, se difundieron rumores sobre su vida privada, como posibles conflictos con compañeros de clase y situaciones escandalosas, todo ello sin evidencia alguna. La joven rechazó repetidamente ser tratada como una figura pública y luchó legalmente para proteger su intimidad.
En este contexto, el juez establece que el hecho de que Julia sea activa en redes sociales no justifica que los medios utilicen su imagen sin consentimiento. De acuerdo con sus abogados, este fallo representa un importante precedente para otras personas que, aunque sean hijas de personajes famosos, desean mantenerse al margen de la exposición mediática. Como explicaron sus representantes legales, “una persona por muchos seguidores que tenga en Instagram no tiene por qué ver cómo un tercero emplea sus imágenes sin consentimiento”.
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Además de la recuperación de su anonimato, Julia Janeiro será indemnizada con 220.000 euros. Telecinco deberá pagar 190.000 euros, mientras que Kiko Hernández deberá abonar 30.000 euros, ambos por daño moral. Esta decisión, que llega en un momento en que su hermano Alejandro también ha alcanzado la mayoría de edad, refuerza el deseo de la familia de permanecer alejada del foco mediático.
De esta manera, tanto Julia como Alejandro han dejado en manos de la justicia la protección de su intimidad y su derecho a decidir sobre su propia imagen, demostrando que la familia sigue firme en su deseo de vivir una vida ajena a los titulares y las cámaras.
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