Big Eyes
Basada en la historia real de Walter Keane (Christoph Waltz), uno de los pintores más exitosos de los años 50 y principios de los 60. El artista alcanzó una notoriedad asombrosa al revolucionar la comercialización y accesibilidad del arte popular con sus enigmáticas pinturas de niños abandonados con grandes ojos. Sin embargo, la verdad terminaría saliendo a la luz: la obra de Keane no fue creada por él, sino por su esposa, Margaret (Amy Adams). Al parecer, los Keane vivieron una mentira que fue creciendo hasta alcanzar proporciones gigantescas. Big Eyes se centra en el despertar de Margaret como artista, en el fenomenal éxito de sus pinturas y la tumultuosa relación que mantuvo con su marido, catapultado a la fama mundial mientras se llevaba todo el crédito por el trabajo de Margaret.
Musarañas
España, años cincuenta. Montse (Macarena Gómez) ya no es joven, ha perdido su juventud cuidando de su hermana pequeña, encerradas en un siniestro piso del centro de Madrid. Su madre murió en el parto de la pequeña (Nadia de Santiago), y el padre (Luis Tosar) no pudo soportarlo. Huyó cobardemente dejándolas solas. Obligada a ser padre, madre y hermana mayor, Montse se esconde de la vida, entre cuatro paredes, alimentando un temperamento obsesivo y desequilibrado: padece de agorafobia y no puede dar un paso fuera de casa. Ella no entiende lo que le sucede, y el sufrimiento que esa extraña enfermedad le genera la obliga a refugiarse en un mundo de Padrenuestros y Avemarías.
Montse trabaja de costurera y el único eslabón que la une con la realidad es la niña, una niña que está dejando de serlo. Un día, esa cadena se rompe: Carlos (Hugo Silva), un vecino joven e irresponsable, tiene la desgracia de caerse por las escaleras, buscando ayuda en la única puerta a la que ha sido capaz de arrastrarse. Montse le recoge. Alguien ha entrado en la madriguera de las musarañas… puede que no vuelva a salir.
Deja un comentario