El próximo 10 de julio, el cantante tendrá que comparecer ante la justicia en Miami por conducir con la licencia caducada, seis meses antes e intentar obstruir la justicia.
Enrique Iglesias acompañado de un amigo, conducía por la autopista en
Florida acompañado de un amigo, en un “Cadillac Escalade” color blanco, y entró en unos carriles que habían sido cerrados por una emergencia.
Cuando el cantante, que conducía el coche, vio la sirena del coche patrulla, instándoles a parar, intentó cambiarse por su amigo que estaba en el asiento de atrás y siendo vista la maniobra por los policías.
Los policías aunque reconocieron al cantante, no dudaron en esposarle al igual que a su compañero y detenerles.
Los dos tendrán que acudir, aunque se han declarado culpables, al juzgado y enfrentarse a dos cargos, uno conducir con una licencia caducada hacía seis meses y obstruir la labor de los agentes, aunque sin violencia.
Deja un comentario