Por Barbireando
Mis aires como siempre me llevan a destinos que son mágicos. Desde hacía mucho quería ir a Carmona… Y os preguntaréis por qué. Conocí a un Carmonense y me enseñó fotos de sus atardeceres infinitos y ya no he parado hasta que conseguir escaparme a este destino tan mágico.
Colmenar Viejo tiene tanto por descubrir
Descanso en “El Tinao de la Petra”
Accedo por la carretera y ahí, imponente en un montículo, está la ciudadela amurallada, con un enclave privilegiado. En plena campiña sevillana se levanta la milenaria Carmona. Una ciudad que destaca por su monumentalidad y por la huella de las diferentes culturas que la han poblado a lo largo de su dilatada historia… Iglesias, palacios y murallas forman parte del importante patrimonio artístico que alberga su casco histórico, dominado por la imponente imagen de su fortaleza de origen árabe, el Alcázar del Rey Don Pedro.
Al principio se llamaba Carmo. Ha estado poblada desde hace más de 5.000 años y posiblemente, fue una de las ciudades más fortificadas del reino de los Tartessos.
La ciudad participó con el romano Julio Cesar en la sublevación de la Hispania Ulterior. Sobre esta ciudad dijo: “Carmona es, con mucho, la ciudad más fuerte de toda la provincia [Bética]”. Y la verdad que lo es, esta ahí tan eterna y tan estoica. Ha tenido todo tipo de poblaciones y se ha mantenido. Tras la invasión musulmana del siglo VIII pasó a ser la capital de uno de los reinos de taifas. Fue reconquistada en 1245 por Fernando III El Santo, que la repobló y la dotó de fuero propio.
Tiene un halo romántico, lleno de rincones donde parece que va a salir andando en cualquier momento un personaje de cualquier etapa histórica. Pero sin duda alguna, su luz y su misticismo es algo que te deja con la boca abierta. Puertas monumentales que te hacen entrar en otra época, Plazas, calles de cal estrecha donde el sol se proyecta de fondo; conventos, Iglesias, casas palacetes, casa señoriales, zonas amurallada, olor a jazmín, tapeo… Ademas de un Sky Line que te deja con la boca abierta y por un momento piensas que no estás en la provincia de Sevilla.
Caminando por sus calles me doy cuenta que hay mucho que descubrir, que hay mucho escondido en cada plaza. Decido ponerme en manos de Adarve Cultural para descubrir cada historia interésate. Reservo su ruta nocturna para descubrir esa Carmona tan mágica… Ohhhhhh
Y por el día, como dicen en este rincón, “Cuesta arriba que fatiga y cuesta abajo que trabajo”… ¡Podéis imaginaros las altas temperaturas!. Así que me dispongo a contratar “Carmona Tourist Services” una visita guiada por Carmona en una especie de autobús que está adaptado a las calles tan estrechas de este rincón tan mágico. Nos recoge en la entrada del Parador del Carmona.
El tema tapeo ya sabéis que me encanta y siempre busco barras que tengan buenos caldos y buenos manjares. Sin duda me quedo con “Casa Curro Montoya”, en la Calle Sta. María de Gracia, 13. Nada más traspasar su puerta el tiempo se para y parece que entras en otra época donde se unen antigüedades con temas taurinos.
Germán Cava Montoya es el cocinero experimentado. El nombre de Curro Montoya se debe al abuelo de Germán, Curro Montoya Egea, más conocido en Lora del Río como “El Niño de la Huerta”
Además de la carta de platos tienen un amplio capítulo de sugerencias en el que van jugando con productos de temporada. Así se puede encontrar desde un clásico plato de espinacas con garbanzos hasta una original ensaladilla de chocos, en la que el cefalópodo sustituye a las patatas. Se puede tapear en la planta baja o comer de carta en la primera planta. Los postres también son de la casa y en los vinos se hace un esfuerzo por las etiquetas andaluzas, no faltando tampoco en los postres el anís de la localidad.
Y para el descanso de la guerrera, elijo sin dudarlo el Parador. Allí es donde una guerrera como yo se abandona al relax. En un edificio que se levanta sobre las ruinas de un impresionante alcázar árabe del siglo XIV que corona el pueblo y te ofrece una fabulosa piscina, terrazas con vistas a la campiña y un encantador patio interior rodeado de apacibles salas de estar. El restaurante, antiguo refectorio, es uno de los más espectaculares de la red de Paradores; ofrece vistas preciosas a la piscina y al luminoso horizonte andaluz.
“Así como el lucero brilla en la aurora, así brilla en Andalucía Carmona”.
Esta frase pronunciada, según dice la tradición, por Fernando III El Santo, figura en latín en el escudo local. Define perfectamente la sensación que queda en el ánimo del que visita y conoce esta ciudad asentada sobre la vega del río Corbones.
Querid@s tod@s, ¡hasta la semana que viene!
Espero que os guste… Besos y gracias por leerme.
2 Comentarios
Excelente artículo donde describes perfectamente mi ciudad, Carmona. Yo, nacida en Carmona y viviendo en Málaga, me doy perfecta cuenta de la importancia que tiene mi pueblo y de como , cada vez más, esta adquiriendo un importante renombre cultural y turístico, gracias a personas como tú que escriben tan bien y hacen conocer a todos las bellezas de nuestra Andalucía. Gracias
De verdad que solo puedo darte las gracias por tus palabras. Me has emocinado mucho. Que maravillosa ciudad y me ha robado el corazón, volveré y volveré siempre porque es de esos lugares mágicos. Y que decir de la personas que lo conforman… Como dice esa expresión que tanto me gusta : “canela en rama”. Un beso fuerte
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