La joven española se alzó con el título de campeona del mundo de Bádminton. Hacía quince años que ningún no asiático se llevaba semejante premio.
A sus 21 años Carolina Marín ha hecho historia y así emocionada y feliz no pudo ocultar el gran orgullo que sintió al recibir la medalla de oro como campeona del mundo de Bádminton en el Mundial de Dinamarca. Un deporte dominado por los deportistas asiáticos que habían mantenido su título desde hacía quince años. Frente a ella, la número 1 del mundo Li Xuerui a la que venció con una emocionante remontada por 17-21, 21-17 y 21-18.
Atrás quedan muchas horas de vídeo para analizar a sus rivales, muchas horas de entrenamiento y mucha lucha y pasión para conseguir vencer a su adversaria de origen asiático donde el bádminton es deporte rey y donde ella se ha colado con méritos propios. Los datos son claros, unas 6.800 licencias en España por cien millones en China…
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